¿Coreografía simétrica? ¿Entre amantes? Error. |
Entre amantes no hay simetría. Para que exista la entrega que entendemos por amor, sólo hay una condición: El sometimiento. |
Para Una Boda.
Hace tiempo,
leí un hermoso libro de un escritor de mi tierra.
Un libro que me cambió la vida,
el libro por el que hoy soy escritor.
Porque los buenos libros son así,
sólo hay que estar atento.
En un cuento que se titula
“La Hora de Quitarse una Deuda”,
el narrador
detalla una conversación con una antigua amante,
cuenta como le dijo
que amar a alguien y estar enamorado
no son la misma cosa.
Ella, sorprendida,
respondió que eso tenía que explicárselo.
Él, como suele pasar en esas ocasiones,
no supo cómo hacerlo,
supongo que prefirió desnudarla,
besarla, y no tener que dar explicaciones.
Prefirió amarla.
He aquí lo que, meses después,
con las ideas puestas en orden,
aquel hombre ofreció a su amante:
Uno.
Enamorarse viene de fuera,
mientras que el amor nace dentro.
Enamorarse viene desde los ojos hacia dentro,
desde la piel, las caricias, desde las palabras del otro.
El amor crece dentro,
y te hace escuchar palabras silenciosas
que se han ido hilando con el tiempo.
Dos.
Se dice “estoy enamorado”, pero “te quiero”.
El enamoramiento es intransitivo,
como si fuera algo incontrolable, inconsciente.
El amor, por otro lado, es transitivo,
porque es lo que tú quieres.
El amor es consciente,
es una consecuencia de nuestra voluntad.
El enamoramiento nos coge sin que tengamos que forzar nada.
Tres.
El amor es el resultado del conocimiento,
mientras que el enamoramiento
es una fuerza que te empuja a conocer,
su existencia es anterior al conocimiento.
Cuatro.
El amor viene con el tiempo,
mientras que el enamoramiento
anda siempre con prisas,
como si el tiempo fuera a terminarse.
Cinco.
El enamoramiento
es sentir que nada te hará daño.
El amor
es saber cómo podrás
superar el daño que te harán.
Seis.
El amor es la consecuencia de una belleza
que ha conocido malos momentos,
por lo que el amor es fuerte.
El enamoramiento
es el origen de una belleza
que no conoce malos momentos.
El enamoramiento es débil.
Siete.
Para pasar del amor al odio
puede pasar un siglo.
Desde el enamoramiento al odio
no hay ni medio paso.
Ocho.
Amar es estar con el ser amado.
Enamorarse es hacer algo con el ser amado.
Nueve.
Cuando se termina el amor,
queda una tristeza.
Cuando se termina el enamoramiento,
queda un vacío.
Un vacío se puede llenar con facilidad.
La tristeza, cuando se calma,
te deja una huella dentro, un vestigio,
y algunas penas posteriores
te renovarán el dolor de ese rastro
durante el resto de tu vida.
Diez.
Cuando el enamoramiento se acaba
se suele decir “¡Quiero matarla!
¡Quiero matarlo!”
Cuando el amor se acaba
se suele preguntar “¿Y ahora para quién vivo?”.
El que quiere matar
pronto olvidará esa idea loca.
Al que no sabe para quién vivir
le será más complicado encontrar la respuesta.
Para Una Vida.
La gente
quiere más enamoramiento que amor,
es lo que buscan.
Aunque se lo nieguen.
Esa pasión acelerada
que es capaz de darle la vuelta a la vida,
enamorarse es mucho más fácil que amar,
no depende de uno mismo.