El placer de la coprofagia supone la multiplicación del deseo, Picasso gran experto en estas delicadezas, lo comprobó en la riqueza de su obra. Sade nos instruyó a nunca desperdiciar esta oportunidad de sometimiento dócil y generoso. El año que inicia te deseo que sea de esa abundancia que nace de nuestros orígenes.
Eko,
31 de diciembre 2009, Coyoacán.