El Cambio al Ex Libris de la Emperatriz Teodora

El ex libris de la Emperatriz Teodora y su mascota lo cambié ¿Por qué? La idea del sometimiento es muy valiosa, pero el dibujo no tiene la tensión del sexo que nos convierte en el beso de Gericault, no en éste par de muñequitos pasivos.



Ninguna emperatriz se entrega así a su león. Por eso es un mal dibujo, no hay sometimiento, no hay emoción.







Desapareció el león y apareció la cara de la Emperatriz y en una esquina dibujé una cortesana ornamental. En lugar del león está un cuerpo tibio a su servicio.






Borré la ornamentación, es basura. Hay que concentrarse en la Emperatriz que amenaza o acaricia los genitales del incógnito y observa como se llena la copa de sangre. La escena está completa.


Publicado en Laberinto gracias a la concupiscente tolerancia de José Luis Martínez S.


Lord Ganesh protege a los libros con lectores

Los libros cobran vida cuando los abro, y empiezan a platicar desde la primera letra. Estamos contenidos en los libros, lo demás es ceniza....